Tecnología de baterías de automóviles eléctricos: los principales tipos de baterías
Las baterías de automóviles eléctricos (EV) se diferencian por los elementos químicos utilizados. Distinguimos principalmente entre: baterías de iones de litio, níquel-hidruro metálico y de plomo-ácido. Elegir la mejor batería para vehículos eléctricos no es tarea fácil, puesto que depende de muchos parámetros: tipo de vehículo, potencia, nivel de uso, etc.
A continuación, ofrecemos una breve descripción de los diferentes tipos de baterías utilizadas en la industria automotriz junto con su aplicación.
Batería de iones de litio: gran popularidad y alto rendimiento
No cabe duda que las baterías de iones de litio son las que más han contribuido al desarrollo del sector de los vehículos eléctricos en los últimos años. Se caracterizan, principalmente, por su alta eficiencia, un precio reducido y un alto nivel de productividad con relación al peso de la celda.
Se considera que este tipo de baterías son las mejores en función de los siguientes parámetros: optimización del tamaño y peso de la batería, relación entre masa y cantidad de energía almacenada y precio. Las baterías de iones de litio también se pueden encontrar en muchos dispositivos cotidianos, como teléfonos, ordenadores o aspiradoras.
Batería de hidruro metálico de níquel: idóneas para un uso especializado
Estas baterías se usan menos debido a sus especiales parámetros químicos y físicos. Hay que tener en cuenta que el hidrógeno es una materia prima que requiere un control especial. Por otro lado, la batería pierde energía cuando no está en uso, pero esta desventaja se compensa con la larga vida útil de la celda. Las baterías de hidruro metálico de níquel se utilizan básicamente en dispositivos especializados, como equipos médicos. Una desventaja son sus elevados costos de producción.
Baterías de plomo-ácido: baja vida útil y potencia impresionante
Las baterías de esta categoría se caracterizan por unos excelentes parámetros de potencia. Sin embargo, no tienen un buen rendimiento en bajas temperaturas, por lo que no se consideran idóneas para su uso en un vehículo eléctrico. Cabe decir que, aunque las baterías de automóvil estándar también registran una disminución en tales condiciones, las de plomo-ácido tienen, en comparación, un peor desempeño en este aspecto. Sus ventajas incluyen: bajos costos de producción y confiabilidad.
Supercondensadores: soporte para el rendimiento de la batería
Los supercondensadores o ultra condensadores se utilizan principalmente para proporcionar la energía necesaria cuando se produce un corte de energía temporal. Por este motivo, también son útiles en coches eléctricos, donde su función es proporcionar suficiente energía cuando sea necesario.
Muchos vehículos eléctricos usan un paquete de baterías, es decir, varias celdas simultáneamente. Al combinar las capacidades de los supercondensadores con baterías de iones de litio y de hidruro metálico de níquel, se pueden lograr mejores resultados que con celdas individuales. Actualmente, el sector de la automoción está dominado por las baterías de iones de litio, las cuales se utilizan con mayor frecuencia en los coches eléctricos.
Batería de iones de litio o de hidruro metálico de níquel: ¿cómo se elige la mejor batería para un automóvil eléctrico?
Aunque en la actualidad aún se encuentran en pleno proceso de desarrollo, las baterías de iones de litio se utilizan cada vez con mayor frecuencia. Es más, la tecnología asociada a estas células está avanzando a pasos agigantados. Los principales proveedores están trabajando para derribar todo tipo barreras en la gama de vehículos que utilizan este tipo de batería como fuente de energía, por lo que se prevé que pronto serán muy populares.
Las baterías de hidruro metálico de níquel se utilizan en vehículos híbridos. El sector de los vehículos eléctricos rara vez hace uso de baterías de plomo-ácido, aunque ocasionalmente complementan una batería de iones de litio.
Los supercondensadores también encuentran su lugar en los coches eléctricos, lo que les permite aumentar la potencia del vehículo en caso de una carga elevada. Gracias a esto, se puede soportar una batería estándar durante la aceleración. Los supercondensadores también son muy importantes para el frenado regenerativo, lo que hace posible convertir la energía térmica en electricidad.
Ver también: Conceptos básicos de la batería eléctrica – toda la información necesaria: coste, carga y sustitución
¿Qué tipo de batería se utiliza en los vehículos eléctricos?
El uso de una batería en particular depende no solo de su rendimiento, sino también del tipo de vehículo. En el caso de vehículos totalmente eléctricos e híbridos enchufables, que se pueden recargar desde una toma de corriente, funcionan normalmente con baterías de iones de litio, mientras que los híbridos tradicionales utilizan principalmente baterías de hidruro de níquel.
La mayor contribución del motor de combustión interna al funcionamiento del vehículo permite permitir una mayor tasa de pérdida de energía cuando no está en uso. También vale la pena recordar que en el caso de los automóviles híbridos, las baterías no funcionan bajo carga máxima durante mucho tiempo.
Conviene remarcar que los vehículos eléctricos son mucho más eficientes que los vehículos de combustión. El costo de la electricidad es en la mayoría de los casos mucho más bajo que el precio del combustible necesario para recorrer una ruta similar. Actualmente, las soluciones más eficientes del mercado permiten cubrir una distancia de unos 500 km con una sola carga.
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